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Despues de un buen dia de descanso ayer, Graeson se levanto mejor y con ganas de explorar la ciudad el doble. Con mapa en mano nos fuimos al French Concession, una area de la ciudad llena de restaurantes y almacenes en el que la arquitectura es completamente Europea. Nos encontramos en pasadizos de piedra, en donde peatones dsifrutaban del sol , unos almorzaban, otro caminaban mostrando sus mejores ropas de disenador en contra de edificios de una epoca pasada.

Despues de caminar un rato, decidimos irnos al Templo  del Buddha de Jade. Uno de los unicos templos budistas en China, oraciones e inscencio inundaban el paisaje, los tigres a las entradas de los templos llevaban miles de cintas rojas que se movian al son del viento. Buddhas gigantes miraban desde arriba a sus visitantes, rodeados por guerreros de muchos brazos que lo cuidaban. Lastimosamente para ver al Buddha de Jade, nos toco pagar otra vez, y no fue tan impresionante como nos imaginabamos.
Cansados de improvisar tripodes de piedra y cajas de cigarrilos, nos fuimos al Fake Market a buscar un tripode barato para tomar fotos . Con ansias y esperando un san andresito o pasaje cali, nos preparamos para ser empujados, para que nos obligaran a comprar relojes y carteras piratas y que no descansaran hasta que lo compraramos. Para nuestra sorpresa el mercado, era super civilizado. Cada uno con un local, las cosas organizadas y lastimosamente cada puestico vendia lo mismo. El de camisas de ” marca ” , el de carteras, el de relojes, el de jueguetes, nada de lo que esperabamos. Yo pense que estando en  China , iba a encontrar absolutamente todo lo que me imaginaba, barbies con tres cabezas, el ultimo tripode que toma helicopter shots, el mundo de Hello Kitty. Me quede con ganas de tripode y camiseta de Hello Kitty.

Fuimos en busca del ” People’s Square”, un parque, pero no lo encontramos. En cambio vimos la ciudad absolutamente vestida de neon. Nos fuimos al Pudong, el area famosa de Shanghai en el que los edificios compiten por el cielo y el sol no es necesario cuando miles de luces alumbran como el dia. Que vista! ver del otro lado del lago, edificios europeos construidos en el siglo pasado mientras barcos de colores pasan. Del otro lado la Perla del Oriente imponente ante rascacielos coloridos compitiendo por atencion. El esplendor de la ciudad de noche, es la razon por la que Shanghai gana su magia, y solo por ese paisaje me alegra que vinimos :).